Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.
Romanos 8:19-21

A veces, al pasar tiempo en la presencia de Dios y acercarse más a Él, pueden
aflorar recuerdos o sentimientos dolorosos. Esto se debe a que Jesús quiere hacerle una persona saludable y completa. A fin de obrar hacia ese objetivo y sanarle, Él debe tocar las heridas de su vida, desarraigando las mentiras y fortalezas a las que usted ha estado viviendo esclavizado. 

Por eso, de repente puede volverse sensible a ciertos tipos de personalidad, 
factores estresantes o recuerdos que usted pensó que había superado. Él los 
expone, iluminando el hecho de que están impidiendo su progreso, y le muestra 
cómo dejarlos atrás. 
Es difícil, pero si usted confía en el Señor Jesús en eso, disfrutará de la plenitud de la libertad y el propósito para los cuales Él lo creó. Por consiguiente, no tema. Invítelo a pasar y permítale que lo sane.
 
Señor Jesús, confío en que tú sanarás las heridas de mi vida como el Gran Médico. Revélame las mentiras en mi vida, y enséñame la verdad que me hace libre. Amén. 

En su presencia… sea hecho libre.